"A RAS DE SUELO" (Alejandro Blasco Miquele)
buscandomiequilibrio
enero 29, 2019
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La literatura se mide por momentos, por circunstancias, que hacen que nos decantemos por un título u otro. De paseo por la biblioteca un día lluvioso y nostálgico captó mi atención un ejemplar, "A ras de suelo" de Alejandro Blasco Miquele, publicado por una editorial desconocida para mí hasta el momento, Pamiela. Tras leer la sinopsis, se vino a casa. Os cuento el argumento.
Sabemos que Arturo se ha suicidado en Pamplona el 27 de marzo de 2006, precipitándose al vacío desde una ventana de un noveno piso de un inmueble. A partir de aquí, comienza la narración de quien fue su amigo desde la infancia, Roberto, con quien compartió horas, risas, la pasión por los libros e incluso el primer amor.
" Arturo no podía evitar ir muriendo de dolor, de pérdida y de hastío, muy lentamente. Años antes de perder la vida, Arturo ya había muerto de agotamiento."
Lentamente el escritor nos hace un recorrido por el pasado, desde el inicio de la amistad hasta el fin, a raíz de la trágica muerte de Arturo. Con un marcadísimo ambiente metaliterario, iremos descubriendo quién era Arturo, un poeta, un escritor obsesionado con dar a luz una novela. Haciendo caso omiso de la recomendación de sus padres, se instala en Madrid con el único fin de alejarse de Pamplona y escribir, e intentando por todos los medios que publiquen su obra. En ese impasse conoce a Irene, quien se convierta en su amiga, compañera y mujer, quien mejor le conozca. Por motivos familiares ambos deben regresar a Pamplona, teniendo que tomar otros derroteros la vida laboral de Arturo, olvidándose de la literatura, aparcándola, omitiéndola y, al mismo tiempo, entrando en un bucle de infelicidad que solo Irene es capaz de percibir. Ella será quien dé la señal de alarma, aunque sea demasiado tarde.
Tras la muerte de su marido, Irene encuentra entre el papeleo el diario de Arturo, donde expone sus sentimientos más íntimos, sus fantasmas, sus temores, y ésta decide compartirlo con Roberto. De una forma un tanto anacrónica podremos inmiscuirnos en la mente de Arturo. ¿Qué hacer cuándo uno siente que le han arrancado de cuajo lo que más quiere en su vida?
"Siento con el instinto y nombro con el poema. Casi todo lo que escribo tiende, más que a la prosa tan evidente, a la poesía y al verso, porque no es contar lo que quiero, sino sugerir lo que veo."
Este es un libro sobre la angustia de quien solo puede huir de sus fantasmas a través de la muerte, de quien su vida es a su vez su propia cárcel. Desde un respetuosísimo argumento y una cuidada prosa, Blasco nos va relatando todos los sucesos que acontecen respecto a este chico, con la delicadeza de un homenaje. Este texto es un relato íntimo, que narrado de manera constante y lineal hace ir entrando fácilmente en la trama y sentir empatía desde el principio. Quizá para mi gusto sea un poquito extenso, pero no le resta calidad a la lectura del libro. La magia está en el estupendo perfil psicológico de cada uno de los personajes.
" La memoria viaja, arriba y abajo, otorgando forma y casi cuerpo a lo que fue una vida que a fuerza de tanto recordar no parece ya la nuestra. La memoria viaja, incansable, y en algún punto inconcreto de repente se detiene. Solo entonces se calza los guantes blancos del arrebato y se dedica a robar las cuatro pruebas que testimoniaron una infancia, una sonrisa, un dolor. La memoria viaja, arriba y abajo, siguiendo siempre los meandros de lo casi real, tomando posesión de un mundo que existió (...) Y en ese momento, precisamente en ese punto, se convierte en el ataúd profundo de los recuerdos."
Es difícil leer sobre un suicidio de manera ficticia, mucho más duro es vivirlo en la realidad, pero la muerte existe y el suicidio también, y es una manera de descubrir qué puede rondar por la mente de otra persona. A pesar de que no puedo garantizaros salir indemnes, os recomiendo su lectura.